Xóchitl y Claudia, la primera batalla

En los próximos días iniciará la que será una de las primeras grandes batallas entre las virtuales candidatas presidenciales, Xóchitl Gálvez, ungida ayer coordinadora del Frente Amplio por México (PAN, PRI y PRD) y Claudia Sheinbaum –a ser designada el próximo miércoles–, de la coalición Juntos Hacemos Historia (Morena, PT y PVEM). IMAGEN: Archivo FGJCDMX

Mensaje Político

Alejandro Lelo de Larrea

En los próximos días iniciará la que será una de las primeras grandes batallas entre las virtuales candidatas presidenciales, Xóchitl Gálvez, ungida ayer coordinadora del Frente Amplio por México (PAN, PRI y PRD) y Claudia Sheinbaum –a ser designada el próximo miércoles–, de la coalición Juntos Hacemos Historia (Morena, PT y PVEM): la continuidad o no de la titular de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX), Ernestina Godoy.

Por el perfil político más que jurídico con el que se ha conducido esa Fiscalía con Godoy al frente –militante de Morena–, está en juego el futuro de las aspiraciones presidenciales de Xóchitl, quien enfrenta dos acusaciones de otro morenista, y podrían iniciarle un proceso penal para inhabilitarla y dejarla fuera de la boleta electoral.

Pero también si Godoy no es ratificada –termina su periodo el próximo 11 de enero–, Claudia corre riesgo de que un fiscal neutral investigue si tuvo o no alguna responsabilidad en el desplome de la Línea 12 del Metro, que causó la muerte de 27 personas y más de 100 heridas, lo que podría definir la viabilidad de su candidatura. Hay más expedientes.

El proceso de ratificación de Godoy ya se echó a andar con la Ley Godoy y posteriormente la creación del Consejo Judicial Ciudadano, ante el cual en los próximos días habrá de presentar su carta de intención de otros cuatro años. Lo que dicen que hará Xóchitl, junto con la oposición en la capital, es convocar a manifestaciones, obtención de firmas y toda una movilización social que impida que Godoy continúe.

Uno de los temas políticos cruciales es el del fiscal de Morelos, Uriel Carmona, cuya primera acusación por “delitos contra la procuración y administración de justicia” está por desplomarse, a grado que el viernes pasado un tribunal federal ordenó su inmediata liberación. Sin embargo, la Fiscalía y un juzgado capitalino se sacaron de la chistera otra causa penal y lograron reingresar a prisión al morelense, acusado ahora por “encubrimiento por favorecimiento”. El abogado Gabriel Regino asevera que “estamos ante un secuestro político disfrazado de un proceso penal. Vamos a trabajar para que se reconstituya el Estado de Derecho y esta afrenta al pacto federal termine. La realidad es que el fiscal mantiene su fuero constitucional. Hago un señalamiento adicional: no existe feminicidio alguno y lo vamos a demostrar en su oportunidad”, dice.

Hay otro tema político: el caso de la persecución contra el alcalde de Benito Juárez, Santiago Taboada, del PAN, a quien le abrieron 14 carpetas de investigación por supuesto secuestro, todo con la única finalidad de, al ser indagado por esos ilícitos, un juez concediera intervenir sus comunicaciones privadas. En otras palabras, un espionaje político legalizado gracias a la Fiscalía.

La actuación de Godoy tiene más deficiencias que pueden descarrillar su ratificación, con temas muy sensibles para el ciudadano: el repunte de hechos delictivos en lo que va de 2023, como robo de autopartes, extorsiones, robo en transporte público, homicidios dolosos, robo a negocio.

Y otro también grave: las desapariciones forzadas que van en aumento. De 2021 a 2022 se duplicó el número de personas en esa condición, al pasar de 688 a mil 289. Pero si se analiza la administración de Sheinbaum, de 2018 a 2022 creció en 15 veces, al pasar de 91 casos a mil 289, y ocupar el primer lugar a nivel nacional. Ahí la primera gran batalla entre Xóchitl y Claudia hacia la Presidencia. Lo veremos.

 

FOTO: Archivo Fiscalía CDMX

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